«Un enjambre en sus manos”

Cuenta la historia de un pequeño Pedro Nolasco, en cuyas manos se produjo un milagro: cuando era aún muy pequeño, casi un bebé, estiró sus pequeños brazos y puso sus manitas en forma de cuna, para acoger a unas cuantas abejas que, errantes, volaban sin tener dónde construir su casa. Al ver las manitas del niño, se acercaron, y ahí mismo construyeron un hermoso panal dorado, rebosante de miel. Esta anécdota marcó su vida para siempre, aunando generosidad y amor compartido, que desembocó en su incansable labor de ayudar a los cautivos.

Hoy, tus manos, como las suyas, pueden ser un agente de cambio, espacio de acogida y fuente multiplicadora de alimento. Por ello, te invitamos a ser parte de la leyenda, aportando tu granito de arena, para que podamos construir entre todos el panal dorado del cambio, y transformar así la vida de personas migrantes, niños y niñas vulnerables y personas privadas de libertad. Recuerda que tu donación brinda esperanzas y oportunidades a estas personas.

¡Únete hoy y construyamos juntos un camino hacia un futuro mejor!