Andrómaco, el no nacido
- La Merced
- 21 junio 2021
- La Merced, Noticias, Salam
- Concurso de microrrelatos, Cultura, Diversidad religiosa, Fundación La Merced Migraciones, Implicarte, Mercedarios, SALAM
- 0 Comments
«Andrómaco, el no nacido» – de Martín Ernesto Troncoso (Argentina, 1969) – ha sido el relato ganador en la categoría de adultos del II Concurso Literario de Microrrelato de la Fundación La Merced Migraciones, enmarcado en el Proyecto SALAM: Promoción de la convivencia intercultural e interreligiosa y prevención de la intolerancia por motivos religiosos.
A continuación, te lo ofrecemos íntegramente:
«Andrómaco, el no nacido»
Andrómaco era un alma no nata. Esos espíritus puros no suelen pensar tal como nosotros hacemos, menos aún portar nombre desde antes del bautismo. Era una rara avis que deseaba nacer de una vez por todas, pues también estaba dotado de deseo.
¿Deseaba conservar la memoria de su existencia prenatal? Por supuesto ¿Lo lograría? Haría lo posible. Aún vivía en ese limbo donde las almas eran indistintas y aún no portaban el peso de una historia, las marcas de sucesos o el vibrante anecdotario que solo poseen los vivos.
Con la inocencia de un turista visitando nuevos lares, codiciaba absorber cada gota de la vida en el plano de la existencia concreta. Palpar diferencias, asumir lo diferente como propio, con el nobilísimo fin de expandir su conciencia.
Vivir era el primer paso. El segundo, convivir entre propios y ajenos. Disfrutando la diversidad como quien saborea nuevos platos, alimentándose de otros saberes, culturas, creencias y otros tiempos. Desde la soledad del espacio no dimensional Andrómaco anhelaba lo que otros seres rechazaban de plano, aprender y fundirse con el resto. Pero claro ¿qué iba a saber él, que de tan pequeño, aún no había nacido? Un imberbe prendido a la teta y con pañales, resultaba, en comparación, un anciano milenario.
Ya vendrían encapuchados de un mundo viejo a poner en vereda esa alma descarriada, enseñarle que prejuicios y juicios resultan indispensables para sobrevivir en esta selva despiadada.
Aprendería de entrada las clasificaciones principales, nene, nena, malo, bueno, blanco, negro. Todo de a pares, en un daltonismo aberrante que elimina todo cromatismo.
Por suerte las almas, tienden por naturaleza a conservar la inocencia y la pasión por lo vital. El resto es resistencia y un largo camino de retorno, con el maravilloso equipaje de la sabiduría a cuestas.
«Andrómaco, el no nacido» ha sido la obra ganadora de Martín Ernesto Troncoso. Guionista radial, camarógrafo publicitario. Licenciado en Comunicación Social, trabaja actualmente en el área de Cultura del Archivo General de la Nación Argentina.